¿Es Brasil el corazón del mundo y la patria del Evangelio?
-Marco, ¿Brasil es o será el corazón del mundo y la patria del Evangelio, de acuerdo con la orientación del plano espiritual, en tantos hechos que están ocurriendo que demuestran lo contrario?, ¿cómo entender eso?
-Hay que responder con cuidado esta cuestión, debemos tener cuidado por lo siguiente:
Nosotros espíritas no tenemos nacionalidad, los seres humanos no tenemos nacionalidad, nos reencarnamos aquí por una necesidad nuestra momentánea, como podríamos haber reencarnado en Japón, Oriente Medio, donde fuese en otro planeta, dónde fuese. La cuestión es el medio tradicional, cultural incluso, muchas culturas se dicen especiales.
Yo voy a referir aquí una tradición judaica de pueblo elegido, nosotros no podemos engañarnos y considerar que somos un pueblo elegido, no podemos considerar que estamos en un medio diferenciado del resto del mundo o de la humanidad como un todo. Porque cada lugar en el que estuviésemos va a ser útil para nosotros, independientemente de las fronteras geográficas que este lugar tuviese, incluso porque esas fronteras cambian con el tiempo.
Las fronteras de Brasil de hoy, hace unos siglos atrás no eran así, como de aquí a algunos siglos no se sabe si van a ser así. Entonces no es el lugar geográfico lo que importa, vamos a entender el lugar donde hoy tenemos la mayor población espírita del mundo por una casualidad que vamos a delimitar aquí en Brasil. Pero el movimiento espírita mundial está creciendo fuertemente y felizmente contamos actualmente con espíritas en todos los rincones del planeta, representando las enseñanzas de los espíritus.
Yo estoy hablando solamente de Espiritismo no estoy entrando en verdades perennes que otras doctrinas y otras filosofías pueden también estimular a sus habitantes a seguir un camino de liberación interior del orgullo y del egoísmo.
Para hacerse una idea, dos tercios de los habitantes del mundo no son cristianos, estamos hablando de religiones, dos tercios del mundo no es cristiano. Si consideramos China e India, solo los dos, cada uno tiene más de un billón de habitantes, solo los dos es un tercio de la población del planeta, no son cristianos.
Hay que tener cuidado con esta cuestión de direccionar la salvación del hombre simplemente por el rótulo religioso que él abraza.
Entonces volviendo a la cuestión de que Brasil, culturalmente se divulgó que aquí sería un ambiente privilegiado en detrimento de las demás naciones. Yo voy a volver a usar la expresión vamos a tener cuidado, porque los espíritus no tenemos nacionalidad, nosotros no somos el pueblo elegido, estamos aquí atendiendo a una necesidad evolutiva que va a depender única y exclusivamente de nuestras acciones, sin rótulos.
El Brasil que podríamos llamar hoy, de fronteras geográficas, es uno de los mayores países del mundo, formalmente constituido.
¿Cuántos Braciles pensamos que existen dentro del mismo país? Varios, nordeste, sur, centro, oeste, cada uno tiene una cultura cada uno tiene una manera de ser, el idioma es el mismo la cultura que felizmente fue diseminada, y sirvió para unir el país, vía televisión, tuvo un papel muy grande en esto.
Pero hay que abandonar un poco esa pretensión de pensar que nosotros somos el pueblo elegido.
Ah, pero hay un libro, Brasil coraçao do Mundo ¿saben de dónde viene esta frase?
El primer libro de Chico Xavier, Parnaso de Além-Túmulo, tiene uno de los poemas donde Olavo Bilac coloca allí, él usa esta connotación, Brasil corazón del mundo, patria del evangelio, está allí en Parnaso de Além-Túmulo, después se transformó en libro, novelado.
No vamos a entrar aquí en las cuestiones históricas que pueden ser cuestionables o en hechos un poco pintorescos que descaracterizarían a Jesús, Jesús no se pone triste, Jesús no preguntaría qué ocurrió, es el gobernador del planeta, ¿cómo él no va a saber lo que ocurrió con el evangelio?
Hay que tener cuidado con algunas cosas noveladas, que tenemos en la cultura del movimiento espírita, yo no quiero herir sentimientos, pero un espírita independientemente de si es brasileño o no, él tiene que mirar a sí mismo, y no pensar que dónde él nació va a ser algo diferencial en su proceso evolutivo.
Cada ser humano está en ese camino y ahí vamos a retomar la cuestión de Brasil corazón del mundo, que exige un cuidado mayor.
Muchas personas intentan hacer malabarismos intelectuales para justificar el nombre, Brasil hoy es uno de los países donde más se mata del mundo, muertes violentas Brasil hoy está inundado de aspectos culturales que avergonzarían a muchas otras naciones, pero nosotros tenemos muchas cosas positivas, tenemos que enorgullecernos en el buen sentido de muchos aspectos culturales de fraternidad, pero no considerar que el brasileño, por definición, es igual en cualquier lugar, y ahí las personas van a recaer en las características de las personas.
Entonces entrando en esa respuesta, que toca asuntos polémicos, porque es un asunto polémico para mucha gente, no es el rótulo o la nacionalidad que va a hacer a alguien mejor que otro, no es el ambiente cultural donde nacemos que nos va a transformar, simplemente son nuestros esfuerzos, son nuestros actos.
Brasil actualmente está caracterizado como el mayor país espírita en términos de formalización de los seguidores, que se declaran espíritas, por una cuestión de cantidad, pero, ¿sabían que nosotros somos el mayor país católico del mundo, somos el mayor país de la iglesia universal del mundo, somos el mayor país en varias de esas religiones del mundo?, somos los mayores del mundo, y eso, ¿nos hace diferentes?
Nos hace en términos de población espiritualizada, pero que eso se refleje en la cordialidad y en el respeto al prójimo, nosotros aún no encontramos eso en la calle. Nosotros tenemos aún una serie de restricciones.
¿Hasta qué punto nosotros representamos ese amor al prójimo que deberíamos tener?
Y voy a cuestionar aquí de nuevo cuando comentamos los malabarismos que se intentan hacer para justificar Brasil el corazón del mundo, patria del evangelio. Brasil sería un gran hospital que recibe espíritus deudores de todos los lugares del mundo ah, ¿y los otros países no reciben?, los países que hoy están en guerra pasando por barbaridades, personas sufriendo barbaridades, rescatando muchas veces, pero viviendo experiencias que para él por más dolorosa que pueda parecer el dolor.
Nosotros no podemos considerar que somos mejores o peores que nadie, nosotros tenemos características, el brasileño tiene esa visión presumida y, ¿hasta qué punto se puede traer eso hasta el Espiritismo?
Todo país por una cuestión de auto afirmación y por orgullo nacional destaca sus buenas características, todos los países, todos sin excepción, por una cuestión de autoestima de pueblo, de fuerza cultural de aquella nación.
En Brasil la gente transporta nuestros valores para la autoestima ¿dónde?… ¿qué es lo que cuando vamos fuera nos gusta exaltar de Brasil, la naturaleza ¿qué más?, el fútbol, ¿qué más? ¿qué más?, cultura, las fiestas populares, la cordialidad yo pongo un poco en interrogante.
Pero, hasta qué punto nosotros estamos colocando aquí nuestros valores, ahora que llegamos, vamos fuera y hablamos, el brasileiro es un pueblo que ama al prójimo yo voy a estar feliz, pero que es ahí que nos caracterizamos un país que moralmente ya ha dado un paso adelante.
Varias naciones del mundo se respetan, en términos de cultura respeto, de ética, de ética.
Si alguien encuentra algo en la calle aquí hay gente que hace eso también, pero cuando vuelca un camión en la carretera las personas se reúnen para saquear al camión y no para socorrer a al conductor. Este tipo de situación nos va a hacer pensar que faltan aún algunas características.
¿Hasta qué punto nosotros estamos ejemplificando el corazón del mundo y la patria del evangelio?
Voy a volver a la primera cuestión que hablamos, tiene que ser en nosotros no podemos estar dependiendo de los otros para hacer los ejemplos que queremos ser.
¿Quiere ser el corazón del mundo y la patria del evangelio? No espere el rótulo. Hágalo aquí dentro, los otros no lo hacen, pero vamos nosotros a hacerlo, porque es ahí que se va a construir un ambiente mejor.
Entonces Brasil, corazón del mundo es mucho más una figura que fue creada y que nos satisface en cuanto a autoestima y en cuanto a vanidad, que efectivamente se exprese eso en el día a día, que tenemos en nuestras calles, en casa, en las escuelas, el respeto del alumno con el profesor, ahí debería manifestarse el Brasil corazón del mundo patria del evangelio, ¿se está manifestando?
Yo pienso… hay un camino grande aún, ¿cómo es que se va a manifestar en casa?
Cuando las familias estuviesen creando ejemplos de ciudadanos en casa ahí estaríamos construyendo un país efectivamente armónico y que expresa el amor que queremos y no quedarse con el rótulo, que es bonito, es romántico, pero muy cuestionable.
No necesitamos hacer malabarismos para justificar este rótulo, tenemos que hacer aquello, hacer y que suceda, aquello en lo que creemos.
¿Queremos ser buenos, la palabra de los espíritus buenos, queremos ser buenos? Hagamos eso, nosotros, y no vamos a ir por ahí, incluso lo que es una vergüenza, en congresos espíritas internacionales, brasileños llegan allí al congreso espírita, -ah nosotros somos de Brasil, somos del corazón del mundo patria del evangelio. Yo me quedo mirando a los extranjeros que oyen eso, y digo, ¿qué será lo que ellos piensan?
Entonces en lugar de estar orgullosos en este punto, vamos a ser humildes y a reconocer que tenemos mucho por mejorar en este país, tenemos si la oportunidad del acceso al conocimiento espírita, óptimo, eso es una dádiva para nosotros, en esta encarnación.
Nosotros nacemos en otro país en una encarnación siguiente, la gente va a decir, qué pena que no nací en el Brasil, corazón del mundo. No es eso, vamos a tener que valorar dónde nacemos y sobre todo respetar la cultura donde estamos. Con sus características e intentar mejorar. Vamos a transformar este país, no vamos a usar el rótulo corazón del mundo porque nosotros no nos caracterizamos así, el corazón del mundo es cuando nosotros estuviésemos bien y lleváramos eso, sea para compatriotas sea para extranjeros, nosotros seríamos representantes de Jesús y no de un país.
Era eso.
Marco Milani
Traducción, transcripción y subtítulos Cursoespirita.com