Reuniones Mediúmnicas de Proyecto Manoel Philomeno de Miranda

Con el ánimo de orientar a los grupos que se dedican a las prácticas mediúmnicas, esta obra señala los aspectos más importantes relacionados con la organización de los trabajos prácticos: objetivos, selección de los equipos, medidas apropiadas y evaluación. El trabajo está dividido en dos partes, siendo que en la segunda los autores proponen 22 patrones de calidad para guiar los procedimientos de ejecución, así como la postura ética de los participantes, de modo que cada uno esté consciente y a la altura de su tarea.
Una preparación bien cuidada, fundamentada en el estudio y en el equilibrio moral, además de una dirección experimentada y capaz, se presentan como los factores más necesarios para el éxito en las reuniones mediúmnicas.

El Proyecto Manoel Philomeno de Miranda se creó en mayo de 1990 como apoyo y preparación de los integrantes del área mediúmnica de los Centros Espíritas, por medio de seminarios, cursos, encuentros, paneles y conferencias. El equipo actual está compuesto por José Ferraz, Nilo Calazans y João Neves, y anteriormente Geraldo de Azevedo, alejado de las actividades por motivos de salud.
La denominación del Proyecto espírita, como equipo armónico, adquirió una identidad propia con la propuesta de ofrecer servicios en beneficio de la vivencia y de la educación de la mediumnidad, según las bases de la Codificación Kardeciana.
La amplitud de sus actividades abarca las siguientes obras literarias: «Reuniones Mediúmnicas», «Vivencia Mediúmnica», «Terapia a través de los Pases», «Orientación Fraterna», «Calidad en la Práctica Mediúmnica», abordando también el tema de la desobsesión.

Manoel Philomeno Baptista de Miranda nació el 14 de noviembre de 1876, en Jangada, Municipio de Conde, en el Estado de Bahía, Brasil, siendo sus padres Manoel Baptista de Miranda y Doña Umbelina María da Conceição.
En 1914, en la ciudad de Alagoinhas, fue convertido al Espiritismo por el médium Saturnino Favila que lo curó de una grave enfermedad. En esa época, Manoel Philomeno de Miranda conoció a José Petitinga en Salvador, con el cual entabló contactos y se puso a frecuentar las sesiones de la Unión Espírita Bahiana, que en aquella época había sido recientemente fundada. En abril de 1921 fue elegido 2º Secretario de la mencionada Unión Espírita; 1º Secretario, en la elección social del 22 de enero de 1922, dirigiendo la primera sesión como Presidente elegido por la Asamblea General el 27 de abril de 1939, debido a la desencarnación de José Petitinga, siendo reelegido para un año en el ejercicio de esta última función. Sus actividades doctrinarias se han concentrado más particularmente en las cuestiones de la obsesión y de la desobsesión. Su desencarnación se produjo el 14 de julio de 1942.

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